Y ahora un twist para ver y oír.

Esta vez quisiera hacer algo distinto... esta vez postearé sobre el maravilloso mundo de los videoclips (saben, lo mío es lo audiovisual).

No hay mucho en común entre los videos que comentaré, exceptuando tal vez, el hecho de que ambos salieron el mes pasado y que me parecen propuestas bastante imaginativas. El primero es Raindrops de Basement Jaxx: un retorno a la psicodelia-pos-2000's con colores vibrantes y fluorescentes, efectos caleidoscópicos, mujeres en body paint con máscaras y penachos locochones...

Dirigido por Jess Holzworth (diseñadora, fotógrafa de moda y artista visual), esta obra es básicamente un regreso a lo básico por parte del dúo inglés. En esencia es... ¡PURA FIESTA AL RITMO DE LOS JAXX!
No hay narrativa o puesta en escena muy elaborada pero el video en verdad tiene mucho atractivo visual (y no sólo por ese extreme close-up a los pezones encubiertos). Es un video sexy que no cae en lo vulgar y que brilla por su composición, dirección artística, fotografía, ritmo y exoticidad (justo como la rola brilla por su corazón disco-psicodélico-pop, por ende haciendo perfecta combinación). Este video es digno de estar al lado de Rendez-Vous, Romeo y Where's Your Head At como parte de lo mejor que han hecho 'videográficamente'... ¡Uno no más no puede quitárselo de la cabeza!

El segundo es el video de Kids de MGMT, que a diferencia del anterior es mucho más cinematográfico (y largo).

Ya sé, ya sé ¡POBRE NIÑO! Mi reacción inicial fue la misma que espero tengan los de buen corazón de pollo: ¿maltrato infantil para crear una ‘obra de arte’? ¡Qué culeros!, manipular las emociones de un chavito no puede justificarse con eso…
Ahora bien, en la página oficial del grupo se establece que "No children were harmed in the making of this video" pero eso no satisfizo mi curiosidad innata (¿o fue el morbo?). El caso es que por pura casualidad encontré una entrevista con el director (Ray Tintori) en el blog del film Where The Wild Things Are (blog que recomiendo y, sobra decirlo, "I love so";) que me tranquilizó: En la entrevista al susodicho (quien también realizó Time To Pretend y Electric Feel para MGMT así como Spaceman para The Killers) explica que fueron muy cuidadosos con el peque; todo fue cuestión de capturar las emociones necesarias y montarlas estratégicamente (de hecho dice que el escuincle ni siquiera les temía a las máscaras). Con ese peso fuera, me di cuenta entonces de lo exitoso que es el video: en verdad te mueve algo… Te hace sentir y recordar la fragilidad infantil con nostalgia (algo implícito en la letra de la canción). Además está bien producido y puedes leerle varios significados. Es casi un cortometraje.
Por ello es que con este tipo de creaciones uno ve como los videoclips pueden ser más que una herramienta de marketing (el Oracular Spectacular no necesitaba más promoción a año y medio de su salida). Por eso quiero creer que los de MGMT tenían la necesidad de hacer ‘algo más' con esta, una de sus mejores canciones, y francamente lo lograron...

Ya lo único que me sigue freakeando son los vestuarios metálicos que traen puestos, además de la expresión perdida del vocalista... ¡El horror, el horror!